Persiste la desigualdad de género en la dirección empresarial: las mujeres no logran aumentar su cuota de poder
La brecha de género en los puestos directivos de empresas españolas continúa siendo una realidad preocupante, según revela el informe "Brecha Salarial y Presencia de la Mujer en Puestos Directivos 2024", presentado hoy por ICSA Grupo y EADA Business School. A pesar de los esfuerzos por cerrar esta brecha, la presencia femenina en roles de liderazgo ha experimentado una caída respecto al año anterior, sin lograr recuperar los niveles precrisis de 2008.
Los datos muestran que la brecha salarial persiste, con los directivos masculinos ganando un promedio de 93.030 euros brutos anuales, mientras que sus contrapartes femeninas reciben 83.663 euros en promedio, lo que representa una brecha de más del 11%. Esta tendencia, aunque muestra una ligera disminución, avanza a un ritmo tan lento que se estima que harían falta otros 20 años para lograr la igualdad salarial entre hombres y mujeres en roles directivos, una realidad que los expertos consideran inaceptable.
Indry Canchila, ingeniera industrial y socia directiva de consultoría de ICSA Grupo, señala que "la disminución de la brecha salarial consolida una tendencia a la baja, aunque a este ritmo tan lento tardaremos unos 20 años más en lograr una igualdad salarial entre hombres y mujeres directivas, lo cual sigue siendo inaceptable y es necesario trabajar en ello".
La Dra. Aline Masuda, investigadora y profesora de EADA Business School, destaca la necesidad de rediseñar los cargos directivos para promover la conciliación laboral y familiar. Según Masuda, "los puestos que fomentan la presencialidad y las horas extras contribuyen a la desigualdad, ya que la sociedad sigue esperando que las mujeres sean las principales responsables del cuidado de la familia".
En cuanto a la representación femenina en diferentes áreas de dirección, el informe revela que las mujeres solo ocupan el 9% de las posiciones de directora general en España, con cifras estancadas desde hace años. Aunque destacan en áreas como Comunicación (39%), RRHH (33,2%) y Marketing (30,5%), siguen estando subrepresentadas en áreas típicamente masculinas como TIC (5,2%), producción (5,8%) y Comercial (7,3%).
Para abordar esta desigualdad, Canchila enfatiza la necesidad de un cambio en la estructura de las organizaciones y un rediseño en las formas de trabajar, dando prioridad al trabajo por objetivos y resultados sobre el presencialismo. La persistencia de esta brecha de género en la dirección empresarial destaca la urgencia de medidas concretas y políticas inclusivas para promover la igualdad de oportunidades en el ámbito laboral.
La paradoja existente sobre los resultados de este informe es -como EADA viene analizando anualmente- que la evolución de la presencia femenina en los programas de formación ejecutiva y de alta dirección sigue creciendo, llegando este 2024 a su cota máxima de representatividad con un 54% de mujeres en sus más de 70 programas. “La mujer se prepara para alcanzar posiciones de representación y decisión en las empresas y organizaciones. Ahora es el turno de las organizaciones hacerlo posible sin demoras”, afirma el Dr. Jordi Díaz, Dean y director general de EADA.