Noticias

Previsiones optimistas pese a las restricciones crediticias

• El estudio constata un cambio de tendencia económica a partir de datos como el aumento de la rentabilidad de las empresas con beneficios y el descenso de la morosidad
• El principal problema para las empresas, sobre todo para las pymes, son las restricciones crediticias, con un destacado incremento de las comisiones bancarias y de los tipos de interés

La quinta edición del Diagnóstico Financiero de la Empresa Española, elaborado conjuntamente por EADA y la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME) constata un cambio de tendencia en la coyuntura económica actual y una mejora de las previsiones de negocio de las empresas pese a las restricciones crediticias que todavía tienen.

El estudio, realizado a partir de una encuesta a los responsables financieros de más de 800 empresas españolas de diferentes tamaños y sectores, aporta varios datos optimistas, como el aumento de la rentabilidad de las empresas con beneficios, el descenso de la morosidad por segundo año consecutivo y, sobre todo, el aumento de la actividad a comienzos de 2014 –las empresas que prevén facturar más este año son casi el doble de las que creen que perderán ventas.

En la presentación esta mañana del informe, Rafael Sambola, profesor de Finanzas de EADA, no ha querido hablar de recuperación económica pero sí de “un claro cambio de tendencia como se observa, entre otros indicadores, en los perfiles de las curvas de evolución de facturación y rentabilidad de las empresas en beneficio”.

Por su parte, Jesús Terciado, presidente de Cepyme, ha insistido en “la necesidad de rebajar cuanto antes el esfuerzo fiscal que se exige a los pequeños y medianos empresarios, además de abrir las vías de acceso al crédito y de mejorar en la lucha contra la morosidad para asegurar la viabilidad y continuidad de muchos negocios”.

Principales debilidades

Pero el V Diagnóstico Financiero de la Empresa también arroja algunos datos negativos. Por ejemplo, durante 2013 las empresas facturaron un 4% menos y sólo un 52% consiguieron tener beneficios operativos.
A esto cabe añadir las dos debilidades principales que, según Sambola, confirma el informe. Por una parte, el aún reducido porcentaje de ventas en el exterior con respecto a la facturación total. En concreto, el porcentaje de ventas al exterior de las empresas exportadoras supuso el 39% de su facturación total, lo que para el profesor de EADA evidencia “unos niveles de internacionalización claramente bajos, especialmente en un mercado interior que lleva años deprimido”.

Por otra parte está el grave problema de la financiación, pues los bancos han endurecido las condiciones para conceder créditos a las empresas, además de aumentarles las comisiones y los tipos de interés, “algo especialmente marcado en las pymes, como lo evidencia, por ejemplo, el incremento de las comisiones bancarias, con un porcentaje en torno al 80% en las pymes y del 50% en las grandes compañías”.